Consejos y precauciones para la seguridad en zonas volcánicas
Si vives a 20 millas de un volcán, te interesará saber cómo preparar a tu familia y responder ante una erupción.

Evalúa el riesgo volcánico en tu zona
Conoce cuáles son los riesgos de erupción en tu área visitando el Volcano Hazards Program (Programa sobre riesgos volcánicos) del United States Geological Survey (USGS), el cual publica información actualizada sobre la actividad volcánica, incluyendo un sistema de evaluación de riesgos codificado por colores para cada volcán en particular.
Planifica con antelación
Una buena planificación para la seguridad en zonas volcánicas comienza antes de que la erupción realmente ocurra. Ayuda a preparar a tu familia creando un plan de preparación para desastres que incluya un kit de supervivencia ante desastres y un plan de evacuación de emergencia. Las cenizas pueden acumularse tanto en la tierra como en el aire, lo cual constituye uno de los peores riesgos, así que asegúrate de incluir gafas de protección y máscaras de respiración desechables en tu kit para desastres. Además, los gases calientes y los escombros volcánicos pueden aumentar el riesgo de incendio, por lo que es especialmente importante instalar y mantener detectores de humo y extintores en los hogares dentro de una zona de peligro de 20 millas.
Despeja la zona de riesgo volcánico
Lo primero que hay que hacer durante una erupción es sintonizar la información de última hora en un radio con baterías. Los volcanes pueden producir una serie de riesgos que se mueven rápidamente, como escombros que salen despedidos, gases calientes, lava y deslaves de lodo. Si las autoridades emiten una orden de evacuación, busca a tu familia y tu kit para desastres y abandona el área inmediatamente.
Durante una evacuación, trata de evitar los valles y las zonas bajas donde el peligro que suponen los restos que fluyen de un sitio a otro, como los deslaves de lodo, podrían converger y acumularse. Si hay acumulación de cenizas en la carretera, mantén tu velocidad por debajo de 35 millas por hora para evitar derrapar.
Protégete contra las cenizas del volcán
Las cenizas acumuladas tanto en la tierra como en el aire pueden tener un impacto importante en lugares a una distancia de hasta 100 millas de una erupción. Siempre que haya cenizas, respira a través de tu máscara de emergencia o sostén un paño húmedo sobre tu nariz y boca. Protege tus ojos con gafas de protección. También es una buena idea usar pantalones largos y una camisa de manga larga, ya que la ceniza puede quemar o irritar la piel.
Si tu hogar se encuentra dentro de una zona de caída de cenizas, toma medidas para evitar que entren en el edificio. Esto incluye cerrar y/o asegurar todas las ventanas, puertas, chimeneas y conductos de ventilación exteriores. Coloca toallas debajo de la puerta y en otras aberturas. Como precaución adicional, es posible que desees cubrir los artículos interiores, como muebles, electrodomésticos y equipos electrónicos delicados. Cubre también vehículos que se encuentren en el exterior y en el garaje.
Ten en cuenta que la ceniza volcánica es mucho más destructiva que el polvo ordinario. Hasta las cenizas pequeñas pueden tener una estructura dentada que puede rayar el vidrio, el metal y otros materiales. Para eliminar el polvo de las superficies exteriores de la casa, usa una manguera. La ceniza que se encuentre en los interiores debería eliminarse con una aspiradora. Para obtener más información sobre la eliminación de cenizas volcánicas, visita el USGS.
Los daños volcánicos y el seguro
Examina tu póliza de propietarios de vivienda para asegurarte de que tengas cobertura de propiedad para los daños relacionados con esta. Conoce más acerca de los daños volcánicos y la cobertura de seguro o comunícate con un agente de seguros para obtener más información.