El dinero puede ser un factor estresante en muchas relaciones, pero no tienes que permitir que arruine tu felicidad. "La forma diferente en que dispongan de su dinero se puede armonizar a través de discusiones y la creación de un plan organizado para administrarlo", afirma Terry Savage, coautora de The New Love Deal:Everything You Must Know Before Marrying, Moving In, or Moving On. "O puede ser la base de cada pelea que tengan durante el resto de su relación".
Las parejas que discutían sobre sus finanzas al menos una vez a la semana tenían un 30 por ciento más de posibilidades de acabar en divorcio. Aquí te sugerimos cinco estrategias para minimizar factores estresantes, después de que hayas encontrado a tu pareja:
P: ¿Qué ocurre si no coinciden las prioridades de tu pareja y tú sobre los gastos?
R. Puede crear cierto resentimiento, por lo cual es imprescindible entender los objetivos de ambos.
La solución: Reconoce tu estilo de gastos diarios. ¿Caes en la tentación de comprarte algún pequeño capricho mientras que tu pareja solo compra artículos costosos? A menudo, las prioridades relacionadas con los gastos diarios no son las mismas en el día a día. Incluso algo tan simple como el hecho de que una persona lleve almuerzo para ahorrar dinero, mientras que la otra compre almuerzo en el trabajo para ahorrar tiempo, puede crear resentimiento. Entender las metas de ambos (por ejemplo, tiempo empleado en comparación con dinero ahorrado) hace que sea más fácil seguir adelante. También, decide cuál será tu enfoque personal —por ejemplo, cuentas separadas o cuentas conjuntas— al igual que responsabilidades individuales en relación con la salud financiera de tu hogar a corto y a largo plazo.
P: ¿Por qué es importante discutir metas a largo plazo con tu pareja?
R: Ser transparente sobre el gasto futuro ayuda a mantener tu presupuesto actual bajo control.
La solución: Define metas a largo plazo. Ya sea que estés buscando comprar una casa con patio o estés ahorrando para un viaje alrededor del mundo durante un período sabático, discutir con tu pareja tu intención de hacer un gasto importante es fundamental. Una vez hayan definido sus sueños a nivel financiero, trabajen de manera inversa desde ese punto para alinear mejor sus estilos a la hora de gastar —y ahorrar—.
P: ¿Es beneficiosos para la relación discutir con tu pareja los temores con respecto a los gastos?
R: Sí. Ser honesto acerca de tus temores financieros ayuda a eliminar estrés a largo plazo.
La solución: Admite los temores relacionados con los gastos. Los temores financieros, como sentirte agobiado por una segunda hipoteca o no sentirte capaz de liquidar tu préstamo estudiantil, pueden dictar el método que uses a la hora de gastar. A menudo, estos temores pueden estresar a un miembro de la relación sin preocupar al otro, y poner más presión en la relación. La comunicación abierta tiene su recompensa. Aunque revelar tus preocupaciones podría resultar difícil inicialmente, a la larga puede mantener la relación saludable, dice Savage.
P: ¿Cuál es una forma de seguir un presupuesto mensual?
R: Escríbelo. Tener por escrito los objetivos para los gastos hace que sea más fácil no salirte del presupuesto cada mes.
La solución: Llega a un acuerdo mutuo sobre un presupuesto mensual. Cuando estén calculando su presupuesto mensual, asegúrate de que incluya las necesidades y las metas de ambas partes. Y no olvides escribirlas, afirma Savage. Los acuerdos por escrito —un presupuesto junto con una simple lista de quién paga cuáles facturas— permiten que ambos sientan que forman parte importante de la relación y les ahorra discusiones en los meses venideros.