Cómo prevenir las quemaduras infantiles
Los niños pueden quemarse de muchas maneras. Estas son algunas medidas que puedes tomar para prevenir las quemaduras infantiles.
Los niños pequeños aprenden por medio del tacto —un peligro cuando se trata de artículos calientes en tu hogar—. Ayuda a mantener a tus niños seguros con estos consejos para la prevención de lesiones por quemaduras infantiles.
Causas principales de las quemaduras infantiles
- Calor húmedo: Contacto con líquidos, comidas o bebidas, agua para el baño, vapor y líquidos de cocción.
- Metales calientes: Contacto con una estufa, dispositivos de calefacción, pinzas y planchas para rizar o alisar.
- Químicos: Ingerir o derramar sobre la piel limpiador de drenaje o blanqueador.
- Electricidad: Morder los cables eléctricos o introducir los dedos y otros objetos en los enchufes eléctricos.
- Fuego abierto: Chimeneas, parrillas, incendios generados en la basura, braseros para fogatas en exteriores, encendedores y fósforos.
Prevenir quemaduras infantiles
- Disminuye la temperatura del calentador de agua. Mantener la temperatura de tu calentador de agua por debajo de 120 grados Fahrenheit ayudará a prevenir escaldaduras y quemaduras por agua caliente.
- Evita los baños demasiado calientes. La temperatura del agua para el baño debería rondar los 100 grados Fahrenheit. Prueba siempre el agua con la mano antes de que tu hijo se meta en ella.
- Establece zonas "prohibidas". Haz que los calentadores personales, calentadores de agua, estufas y chimeneas sean inaccesible para los niños pequeños, y coloca cubiertas de seguridad a prueba de niños en los enchufes eléctricos. Recuérdales a los niños frecuentemente que estas zonas "prohibidas"están calientes y son muy peligrosas.
- Prueba la temperatura de la comida antes de servirla. Los microondas a menudo calientan la comida y los líquidos a temperaturas muy altas. Los microondas también calientan la comida de manera dispareja, así que asegúrate de revisar la temperatura de la comida en varios lugares antes de servirla.
- Actúa con seguridad en la estufa. Al cocinar, usa las hornillas traseras y mantén los mangos de sartenes y ollas lejos del borde de la estufa para evitar que los jalen. Nunca dejes la estufa desatendida mientras esté encendida.
- Guarda bajo llave los artículos peligrosos. Mantén los líquidos inflamables, químicos abrasivos para limpieza y fósforos o encendedores lejos del alcance de los niños pequeños en un cajón o armario bajo llave.
Es importante que tengas un plan establecido en caso de incendio en tu hogar. Ensayar el plan con tus hijos podría ayudarles a estar preparados en caso de una emergencia por incendio.