Qué hacer si no puedes pagar el alquiler
Muchas personas podrían necesitar ayuda a corto plazo con su alquiler. Conoce más sobre cómo ayudar a afrontar esta situación.
Según un estudio del 2024 realizado por Joint Center for Housing Studies of Harvard University, un récord de 22.4 millones de hogares de inquilinos gastaron más del 30% de sus ingresos del 2022 en alquiler y servicios públicos. Una pérdida inesperada del trabajo o facturas imprevistas, junto con poco o nada de ahorros, podrían dejar a muchas personas sin poder pagar el alquiler. Si tú o un ser querido se enfrenta a esta difícil situación, hay algunos pasos que puedes tomar para obtener ayuda.
Cosas para considerar cuando no puedes pagar el alquiler
Comprende tus opciones de arrendamiento
Cuando tengas dificultades para juntar tu próximo pago de alquiler, intenta revisar tu contrato de arrendamiento. Para prepararte mejor, lee lo que describe tu acuerdo en relación con las multas en las que puedes incurrir debido a pagos atrasados o faltantes.
Habla con tu arrendador
Llama a tu arrendador antes de atrasar un pago para explicarle tu situación y analizar las opciones. Los arrendadores pueden renunciar a las cuotas por pagos atrasados, negociar planes de pago o incluso perdonar pagos para ayudarte a evitar el desalojo.
Llama al 211
El 211 es una línea de emergencia gratuita que proporciona información sobre programas de salud y servicios sociales disponibles en tu área. Las personas que llaman se conectan con especialistas capacitados en recursos comunitarios que pueden guiarlas a la agencia u organización adecuada para sus necesidades.
Habla con consejeros de vivienda
Un consejero de vivienda puede ayudar a los inquilinos a comprender sus derechos y los recursos de asistencia financiera que pueden estar disponibles para ellos. Para encontrar asesores locales, visita el sitio web del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano para obtener una lista de servicios de asesoramiento de vivienda aprobados.
Reduce los gastos
Si no tienes un presupuesto, crea uno. Analízalo para encontrar formas de reducir gastos y pregunta a los emisores de tarjetas de crédito o préstamos sobre los programas de dificultades económicas para reducir tus pagos. Si necesitas ayuda en este proceso, trabaja con un servicio de asesoría crediticia aprobado por el gobierno.
Explora los programas de asistencia para el alquiler
Hay muchos programas gubernamentales para ayudar a los inquilinos en apuros. Si tu situación está relacionada con un desastre o crisis importante, es posible que haya programas de asistencia específicos que puedan ayudar con el alquiler a largo plazo. Además, las viviendas públicas, los hogares de ingresos bajos, las personas de la tercera edad y las personas con discapacidades podrían conseguir una vivienda a largo plazo a través de programas gubernamentales como el Programa de asociaciones de Inversión o el Programa de vales de elección de vivienda.
Para obtener asistencia para el alquiler a corto plazo, consulta los recursos de ayuda para el alquiler que ofrece el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano. Así podrás conocer más acerca de subsidios u otros tipos de asistencia proporcionados por organizaciones benéficas del área, instituciones religiosas o agencias gubernamentales. Si has recibido un aviso de desalojo, puedes acudir a organizaciones locales de asistencia legal que no tienen fines de lucro. Estas organizaciones brindan servicios que pueden ayudarte a encontrar un nuevo hogar, conseguir extensiones de pago o bloquear tu desalojo.
Busca recursos personales
Si estás en condiciones de pedir prestado a tu familia (y crees que tu situación es temporal), considera un "préstamo" familiar a corto plazo. Al establecer este acuerdo, desarrolla un plan detallado para devolver el dinero en el que ambas partes estén de acuerdo. Si tienes un plan 401k, una opción es tomar un retiro prematuro, pero considerando que podrías incurrir en una multa, este debería ser un último recurso.
Considera diferentes arreglos de alojamiento
Preguntarle a tu arrendador si tiene disponible un lugar menos costoso podría valer la pena. Es posible que pueda ayudarte a cambiar a un apartamento más económico. Alternativamente, al revisar tu contrato de arrendamiento, es posible que tengas la opción de subarrendar o agregar compañeros de cuarto, lo que podría aliviar la presión financiera de tus pagos mensuales. Si nada de esto funciona, es posible que debas rescindir tu contrato de arrendamiento, pero revisa primero el contrato para comprender los costos asociados.
No poder pagar el alquiler puede ser una situación aterradora, pero es posible que puedas encontrar una manera de mejorar tu situación con las opciones que se mencionaron anteriormente. Antes de iniciar tu próximo contrato de arrendamiento, considera echar un vistazo a algunos consejos sobre cómo celebrar un contrato de alquiler y algunas preguntas que debes hacer antes de firmar. Cuando te sientas listo para alquilar de nuevo, puedes obtener una cotización de seguro de inquilinos ahora o darnos algunos detalles y un agente de State Farm® se comunicará contigo.