Obtén información sobre el seguro de incapacidad
Entiende tus opciones de cobertura antes de que suceda lo inesperado.
A la mayoría de personas nunca se le ocurre que podrían quedar discapacitadas. Pero las personas que hoy cuentan con veintitantos años de edad tienen 1 de 4 posibilidades de perder al menos un año de trabajo por incapacidad antes de llegar a la edad de jubilación, de acuerdo al Council for Disability Awareness. Además, aunque muchos piensan que sus probabilidades de quedar incapacitados es pequeña, la realidad es que el 26% de los adultos estadounidenses vive con algún tipo de incapacidad. La incapacidad y las finanzas familiares están estrechamente relacionadas.
Las causas de incapacidad son tan diversas como su duración, por ejemplo: de corto plazo, por una lesión que requiere hospitalización, o de largo plazo para recuperarse de un accidente o enfermedad debilitante. Sin importar la causa o cuánto dure, una incapacidad tiene el potencial de impactar negativamente las finanzas de cualquier familia. Aquí te mostramos lo que necesitas saber acerca del impacto financiero de las discapacidades y lo que puedes hacer para protegerte.
¿Qué es el seguro de incapacidad?
El seguro de incapacidad es cobertura que reemplaza parte de los ingresos del empleado cuando este no puede trabajar debido a una enfermedad o lesión que genere incapacidad. El seguro de incapacidad proporciona beneficios que cubren en promedio hasta un 60% del sueldo del empleado.
¿Cómo funciona el seguro de incapacidad?
Generalmente, el seguro de incapacidad es un acuerdo entre tú (el titular de la póliza) y una compañía de seguros. Tú haces pagos mensuales y, en caso de que sufras una incapacidad que te impida trabajar, la compañía de seguros se compromete a pagarte una cantidad mensual. La póliza de seguro explicará detalles como la prima mensual, qué está cubierto y con qué limitaciones (como realizar otro tipo de trabajos), la cantidad del beneficio mensual y la duración de los beneficios.
Tipos de seguro de incapacidad
Existen dos tipos básicos de pólizas: incapacidad a corto plazo e incapacidad a largo plazo.
- Seguro de incapacidad a corto plazo: Como lo dice su nombre, este tipo de pólizas compensa por ingresos perdidos por seis meses o menos. Por lo general, se activa después de que se hayan agotado todos los otros beneficios del trabajo, como el tiempo libre pagado y la ausencia por enfermedad.
- Seguro de incapacidad a largo plazo: Si tu incapacidad dura más tiempo necesitarás cambiarte a la incapacidad a largo plazo. Esta póliza paga una parte de tus ingresos, generalmente del 50% al 80%, hasta un cierto máximo, por un período de varios años o hasta la jubilación, dependiendo del tipo de póliza que tengas.
¿Necesitas seguro de incapacidad?
En un año promedio, aproximadamente el 5% de los estadounidenses sufrirán una incapacidad a corto plazo, de seis meses o menos. Casi ninguna de estas discapacidades tiene su origen en el trabajo. La mayoría de los estadounidenses están lejos de estar preparados para enfrentar un año sin sueldo. De acuerdo con un estudio de la Reserva Federal, el 35% de los estadounidenses adultos no podría cubrir los gastos de una emergencia de solo $400 sin incurrir en deudas, pedir prestado a amigos o familiares o vender posesiones.
La incapacidad y los ingresos
Bancarrota debido a facturas médicas
Según el Council for Disability Awareness, un estudio sobre declaraciones de bancarrota presentadas por consumidores identificó que más del 77.8% de las personas que se declaran en bancarrota citan la pérdida del ingreso como la razón para declararse en bancarrota. Y el 44.3% de estas personas afirmaron que perdieron su ingreso laboral debido a razones médicas.
Incapacidad a través del Seguro Social
El Council for Disability Awareness también afirma que un reclamo exitoso de seguro de incapacidad del Seguro Social puede implicar un largo período de tiempo sin recibir ingresos, pues los reclamos generalmente tardan entre tres y cinco meses para ser aprobados. En el 2021, el beneficio anual promedio era de $15,348 (bastante inferior al nivel de pobreza para un hogar de dos personas). Por lo menos 51 millones de trabajadores estadounidenses adultos carecen de cualquier seguro de incapacidad, que no sea la cobertura del Seguro Social.
Cómpralo a través de tu trabajo o por cuenta propia
Comprar un seguro de incapacidad a través del trabajo es conveniente y puede tener un costo bastante razonable. La desventaja: es posible que no puedas llevarte la cobertura contigo y que la pierdas si cambias de empleo. Según el U.S. Bureau of Labor Statistics, solo el 35% de los trabajadores civiles tiene acceso a cobertura de incapacidad a largo plazo, y solo el 40% tiene acceso a cobertura de incapacidad a corto plazo.
Una póliza individual de seguro de incapacidad podría tener más flexibilidad y brindarte más opciones. La cobertura continúa sin importar la frecuencia con la que cambies de empleo y puedes elegir el período de tiempo durante el que quieres que permanezca vigente.
No todas las pólizas están disponibles en cada uno de los estados. Habla con tu agente de State Farm® sobre cómo coordinar las pólizas a corto y largo plazo y proteger tus ingresos.