Cambia una vida: sé mentor de un niño
Conviértete en mentor de lectura y podrás ayudar a promover la alfabetización, beneficiando a un niño a la vez.
El acceso, nivel socioeconómico y habilidad personal son algunos de los factores que pueden contribuir a que los niños tengan dificultades para leer, pero cualquier retraso en esta destreza esencial para los más pequeños tiene consecuencias de gran alcance. Considera la graduación de la secundaria como ejemplo. En el 2019, Annie E. Casey Foundation realizó un estudio, según el cual se descubrió que los estudiantes con limitada habilidad para la lectura al finalizar el tercer grado de primaria tenían una probabilidad cuatro veces mayor de abandonar la escuela secundaria que aquellos con gran habilidad para la lectura. Según un estudio publicado en el 2019 por National Assessment of Educational Progress, varios distritos escolares —tres de ellos en cuarto grado y once en octavo— experimentaron una baja en las calificaciones de lectura en comparación con el 2017.
Pero hay buenas noticias y una manera inmediata de tener un efecto positivo sobre los niños: la lectura con un mentor. Algunos estudios indican que, cuando los adultos participan en el proceso, no solo mejoran las habilidades de los niños y su disfrute de la lectura, sino también la actitud de éstos hacia la escuela y su participación en actividades extracurriculares, perspectiva de futuro y, a la larga, la oportunidad de que el niño continúe su educación. ¿Estás listo para marcar la diferencia en tu propio hogar y para otros niños? Prueba estas ideas:
Estimula la habilidad del niño
Los mentores de alfabetización —en parte entrenadores y en parte animadores— pueden encontrarse en escuelas y organizaciones comunitarias por todo el país. ¿Cuál es la única meta de estos voluntarios? Ayudar a los niños a aprender a disfrutar la lectura. La manera cómo lo logran varía. Puede que algunos le lean a un niño o toda un aula a razón de una hora al mes (y que les lean a ellos). Puede que algunos reciban entrenamiento formal y se comprometan a participar en una sesión semanal de lectura que se alinee con un plan de estudios específico.
Tu siguiente paso: Busca oportunidades en una base de datos en línea para voluntarios, como Neighborhoodofgood.com®, o comunícate con tu escuela local para conectarte con programas comunitarios de alfabetización para niños.
Estimula el nivel de acceso del niño
Puede que hayas oído hablar del desierto de alimentos, refiriéndose a un área en desventaja económica donde los residentes tienen poco o ningún acceso a alimentos frescos. Algunos expertos de alfabetización han empezado a usar la idea de un desierto de libros para describir la falta de acceso a materiales de lectura para niños. La falta de materiales de lectura disponibles para niños, sumada a la tasa de pobreza, hace que algunos vecindarios sea conviertan en focos ideales para combatir los desiertos de libros.
Little Free Library es una organización sin fines de lucro que promueve los intercambios de libros en vecindarios. Más de 90,000 intercambios públicos de libros se han registrado con la organización y etiquetado como un esfuerzo de Little Free Libraries. Al igual que otros intercambios de libros gratuitos, la idea es llevarse un libro para leerlo y dejar otro para alguien más.
Tu siguiente paso: Puede que las escuelas con dificultades económicas no tengan una organización de voluntarios que pueda financiar un plan de distribución de libros, pero tal vez tú puedas. Considera organizar una campaña de recolección de libros entre amigos y trabaja con los expertos de alfabetización de una escuela para proporcionarle a cada niño por aula un libro que pueda llevarse a casa como propio.
Estimula los recursos escolares
Las bibliotecas escolares siguen viéndose afectadas por la reducción del presupuesto de las escuelas públicas. Algunos estudios han revelado el beneficio que representa tener bibliotecas bien financiadas. Estudios realizados en docenas de estados descubrieron que existe una relación directa entre el incremento de fondos y recursos para bibliotecas y las calificaciones obtenidas en pruebas de lectura. Exponer a los niños a diferentes estilos de lectura y escritura puede ayudar a mejorar su nivel de conocimiento lingüístico e interés en la lectura.
Tu siguiente paso: Ofrécete como voluntario para organizar una recolección de libros a beneficio de una escuela necesitada en tu comunidad. Trabaja con el personal de alfabetización de tu distrito escolar para identificar necesidades particulares y pídele a tus amigos, vecinos y compañeros del trabajo que donen.