Vivienda para la tercera edad: Ayuda a tus seres queridos a decidir
Preguntas para ayudarte a decidir si la vivienda asistida o un hogar de ancianos es la opción correcta para tu ser querido.

¿Tienes un ser querido que se aproxima a la edad de jubilación? No estás solo: Para el 2060, el número de estadounidenses de 65 años de edad o más se duplicará a 98 millones. Esta evolución demográfica también creará un cambio en la vivienda: Se estima que, para el 2030, los estadounidenses con necesidad del cuidado de un hogar de ancianos aumenten en un 75 por ciento.
La transición fuera de una vivienda o apartamento independiente puede significar el paso a una de dos amplias categorías de vivienda para la tercera edad: el hogar de ancianos y la vivienda asistida. Ambos escenarios cuentan con diferentes tipos de personal y de instalaciones según las preferencias personales y las necesidades físicas y mentales. Escoger lo que es apropiado para tu ser querido, ya sea una de esas dos opciones o algo diferente, es una decisión compleja con consideraciones prácticas, emocionales y financieras.
Estas preguntas pueden ser un buen punto de partida:
- ¿Tiene tu ser querido alguna limitación física o mental? Toma el alzheimer, por ejemplo: Se espera que, para el 2050, el número de estadounidenses con esta enfermedad se triplique a 14 millones de personas. En general, es posible que un hogar de ancianos proporcione cuidado y terapia más especializados, usualmente a toda hora, para cuestiones que son específicas para un grupo de personas mayores; este tipo de cuidado puede o no que se ofrezca en una instalación de vivienda asistida.
- ¿Necesita tu ser querido medicación regular? Las regulaciones que afectan a las instalaciones de hogares de ancianos y de vivienda asistida varían de estado a estado, pero normalmente las primeras pueden administrar medicamentos, mientras es posible que las segundas solo puedan dar recordatorios para tomar medicamentos. También es posible que las instalaciones de vivienda asistida no puedan ayudar con el seguimiento del azúcar en la sangre ni revisar otras condiciones crónicas que requieran monitoreo constante.
- ¿Puede tu ser querido ocuparse de sus necesidades diarias? Si tareas diarias tales como bañarse o ducharse, preparar o comer alimentos y usar el baño son un obstáculo, una instalación para personas de la tercera edad con más cuidado constante puede ser una mejor opción. Si tu miembro de familia anciano no está listo o lista para dejar su vivienda pero te gustaría que estén mejor conectados, habla con tu agente de State Farm® sobre sistemas de seguridad y monitoreo disponibles.
- ¿Es la privacidad importante para tu ser querido? Para aquellos que pueden mantener cierto nivel de independencia, tener un espacio propio puede ser de suma importancia. En los hogares de ancianos, las habitaciones y residencias compartidas son más comunes, mientras que las instalaciones de vivienda asistida pueden ofrecer apartamentos privados.
La planificación anticipada es clave para asegurar una transición que proporcione el mejor cuidado para tus seres queridos ancianos. Parte de esa conversación puede incluir ayuda financiera como el seguro de cuidado a largo plazo.
Habla con tu agente de State Farm hoy mismo sobre opciones que se ajusten a tu presupuesto y tus necesidades.