Mantenimiento de la motocicleta: lista de comprobación para la primavera

¿Te hacen los días cálidos evocar un agradable paseo en tu motocicleta? Para ayudar a que el viaje sea más tranquilo y seguro, examina los puntos de esta lista de comprobación para motocicletas antes de emprender tu camino. Y para cualquier reparación compleja, considera acudir a un mecánico.

Inspecciona tu moto antes de usarla

Antes de sumergirte en labores detalladas de mantenimiento, haz una inspección general a tu motocicleta. Una inspección visual puede ayudarte a sentar las bases para un mantenimiento completo y efectivo.

• Busca en el piso y huele si hay fugas de gasolina y otros líquidos.
• Examina los ejes giratorios. ¿Hay alguna pieza móvil que muestre indicios de uso y desgaste?
• Gira la llave para probar las luces y toca la bocina.

Drena y rellena los líquidos

No inicies la nueva temporada con gasolina vieja. Antes de arrancar tu moto, drena el tanque de gasolina y extrae todo combustible que haya estado en el carburador por más de seis semanas. La gasolina asentada puede evaporarse y espesarse con el tiempo, lo que puede obstruir las boquillas del carburador y los conductos. Inspecciona las mangueras de combustible y las juntas, y reemplaza el filtro de combustible, si es necesario.

Recuerda revisar el nivel de aceite, aunque hayas llenado totalmente el tanque en otoño. Por lo general, deberías cambiar el aceite al menos una vez al año. Si recorres muchas millas con tu moto, tal vez debas cambiarlo más a menudo. Calienta el motor de tu moto por cinco minutos para que se calienten también los líquidos. Apaga el motor y estaciona tu moto. Ahora podrás drenar el aceite más fácilmente. Una vez drenado por completo, utiliza un embudo para reemplazarlo con la cantidad y el tipo de aceite correctos, según lo especificado en el manual del propietario.

En la temporada baja, a veces pueden producirse fugas de líquidos y refrigerantes. Es importante drenar el refrigerante viejo y reemplazarlo para ayudar a evitar que se sobrecaliente la motocicleta.

Revisa los frenos

Inspeccionar los frenos es requisito obligatorio de seguridad. Revisa las pastillas, las líneas y el líquido de frenos antes de emprender tu primer viaje. El líquido de frenos puede degradarse con el tiempo, por lo que debes revisar su nivel y, si es necesario, reemplazarlo para ayudar a garantizar que los frenos respondan efectivamente. Reemplaza las pastillas desgastadas o las líneas de freno agrietadas. Además, prueba los frenos delanteros y traseros por separado para ver si están en buenas condiciones y libres de raspaduras o chirridos.

Limpia o reemplaza el filtro de aire

El sistema de entrada de aire puede impactar significativamente el desempeño de tu motocicleta. Limpia el filtro regularmente usando aire comprimido. Asegurarse de que el filtro de aire esté limpio permite que haya buen flujo de aire hacia el motor. Un filtro sucio puede hacer que tu motor funcione con más dificultad. Si está tapado, dañado o se te hace demasiado difícil de limpiar, es hora de que reemplaces el filtro de aire.

Carga la batería

Si se deja la moto parada e inactiva en un garaje todo el invierno, la batería podría terminar descargándose. Muchos motociclistas le quitan la batería a la moto en el invierno y la mantienen con cargadores de carga lenta o de baja intensidad. Si no le quitas la batería, es muy probable que se te descargue y que  necesites recargarla antes de que puedas volver a arrancar tu moto. Usa el cargador correcto y sigue las instrucciones del manual del propietario para conectar y recargar la batería. Después de recargarla completamente, examina las luces delanteras y las intermitentes para verificar que funcionen como es debido. Revisa las bujías, los terminales y los fusibles de la batería para detectar cualquier señal de corrosión y para poder limpiarlos o reemplazarlos, según sea necesario.

Inspecciona las llantas

Nada detiene un viaje más rápido que una llanta desinflada, por lo tanto, considera revisar la presión del aire en ambas llantas. La presión baja puede hacer que sea difícil manejar la motocicleta, además de forzar y desgastar las llantas. Mide y ajusta los niveles de PSI, inflando las llantas, según los valores recomendados por el fabricante. Revisa también para detectar cualquier daño como grietas o podredumbre seca. Reemplaza las llantas, si es necesario.

Revisa tus cables

Asegúrate de que los cables estén en buenas condiciones, incluyendo los del embrague, los frenos, el acelerador y el obturador. Los cables deshilachados o dañados pueden suponer un peligro importante, así que revísalos bien para ayudar a que funcionen correctamente. Reemplaza los que parezcan desgastados.

Limpia la cadena

Muchas de las cadenas modernas son cadenas con O-Ring que requieren de menos limpieza que las cadenas antiguas y no selladas. Limpia bien la cadena para eliminar todo residuo que tenga y vuelve a lubricarla para un desempeño óptimo. Verifica la tensión de la cadena y ajústala, según sea necesario. Haz una revisión exhaustiva para verificar que la cadena no esté demasiado floja. Tu manual del propietario suele indicar las medidas aceptables de holgura de la cadena y las formas de ajustarla.

Lava tu motocicleta

Lavar tu moto no es solo cuestión de apariencia, también puede ayudar a prevenir la corrosión y permitirte inspeccionar el chasis y la carrocería más de cerca. Lava bien tu moto con un detergente suave y evita las mangueras de alta presión que pueden hacer que el agua entre en los rodamientos y las juntas.

Refresca tus habilidades como conductor

Tal vez haya pasado algún tiempo desde que te subiste por última vez a tu moto, así que empieza despacio. Maneja por el vecindario para ver que todo funcione bien. Considera hacer un curso de seguridad para transitar en motocicleta a fin de mejorar tus habilidades de manejo defensivo. Verifica además que tu equipo para montar en motocicleta —tu casco, chaqueta y guantes— estén en buen estado. Tal vez debas también revisar estos consejos de seguridad en la motocicleta como repaso, especialmente  si llevas un pasajero. ¡Invertir algo de tiempo y esfuerzo por adelantado es poco para poder disfrutar de una temporada más segura en la carretera!

Antes de cada viaje, considera hacer una inspección rápida a tu moto. Consulta el manual del propietario para ver cuándo toca hacer las revisiones y lleva la moto a un mecánico para un servicio de mantenimiento para motocicleta más completo.

Consulta con tu agente local de seguros para confirmar que tengas la cobertura de seguro de motocicleta adecuada para tus necesidades.