¿Necesitan seguro los carritos de golf?
Ya sea que estés jugando al golf o saliendo a la calle en un carrito de golf, una póliza de seguro puede ayudar a mantenerte protegido.
Los carritos de golf han evolucionado más allá de su papel tradicional en el campo, convirtiéndose en un modo de transporte más común para el uso diario. Ya sea que estés considerando comprar un carrito de golf por primera vez o quieras salir a la carretera con el tuyo, aquí tienes algunos consejos que pueden ser útiles.
¿Un carrito de golf está cubierto por el seguro de propietarios de vivienda?
Tu póliza de propietarios de vivienda puede ofrecer cobertura en una capacidad limitada mientras el carrito de golf esté en la propiedad asegurada. Para obtener una cobertura más completa, consulta con tu proveedor para confirmar lo que implica tu póliza y para determinar si sería necesaria una cobertura adicional.
Si deseas tener protección de responsabilidad civil adicional, es posible que puedas aumentar los límites de tu cobertura de responsabilidad civil comprando una póliza de seguro sombrilla por separado.
¿Qué cubre el seguro de carritos de golf?
El seguro de carritos de golf generalmente se incluye en una póliza de vehículos recreativos. Puedes seleccionar coberturas similares a tu póliza de auto, como cobertura por lesiones corporales, cobertura por daños a la propiedad, cobertura amplia, cobertura contra choques, cobertura contra conductor sin seguro y cobertura de pagos médicos. Algunos ejemplos de cobertura pueden incluir:
- daños accidentales a la propiedad o lesiones corporales accidentales a otra persona mientras manejas tu carrito de golf;
- un accidente con un vehículo sin seguro que causa lesiones corporales;
- reparaciones por un accidente que causa daños a tu carrito de golf;
- reparaciones por daños causados por robo, incendio, vandalismo y otras pérdidas.
Conoce las leyes de los carritos de golf
Cuando manejas tu carrito de golf, es importante tener en cuenta las leyes y reglamentos establecidos por tu estado, condado, ciudad y comunidad, ya que cada uno puede tener requisitos específicos. Para obtener la información más actualizada y relevante, consulta a autoridades como la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA, por sus siglas en inglés), el Departamento de Vehículos Motorizados (DMV, por sus siglas en inglés) o, si corresponde, la Asociación de Propietarios de Vivienda (HOA, por sus siglas en inglés) de tu vecindario o el equipo de administración del campo de golf.
- Documentación e identificación: para poder manejar un carrito de golf en la vía pública, deberás registrar tu vehículo, tener una licencia de conducir válida y obtener un seguro de carritos de golf en la mayoría de los estados.
- Equipo y seguridad: si tu carrito de golf se clasifica como un vehículo de baja velocidad (LSV, por sus siglas en inglés), según la ley federal, deberás equipar tu carrito con faros delanteros, luces de freno, luces direccionales, luces traseras, reflectores réflex, frenos de mano, espejos retrovisores, parabrisas, cinturones de seguridad y números de identificación del vehículo. Más allá del equipo adecuado, ten en cuenta estos consejos de seguridad para carritos de golf.
Si vives en una comunidad con otros conductores de carritos de golf, pregunta a tus compañeros sobre las reglas y reglamentos locales, ya que es posible que puedan ofrecer consejos adicionales.
¿Qué tipo de carrito de golf tengo?
Hay muchos modelos diferentes de carritos de golf que puedes comprar; puedes elegir entre carritos de golf de gasolina o eléctricos, o puedes ir por más y optar por varias filas de asientos o dejar espacio para tus palos de golf. Para saber qué reglamentos deberá seguir tu carrito, es importante tener en cuenta la clasificación de la NHTSA. Antes de comprar tu carrito y llevarlo a dar una vuelta, determina si tu carrito se clasifica como un carrito de golf personal, un LSV o un carrito de golf modificado para mayor velocidad.
- Carritos de golf personales: son aquellos carritos que normalmente se ven en el campo y se pueden usar para transportar a una o más personas para jugar al golf o viajar por otras razones no relacionadas con el golf en ciertas carreteras públicas. Los carritos de golf personales tienen una velocidad máxima de entre 15 y 20 millas por hora.
- Vehículos de baja velocidad (LSV): esta categoría se aplica a cualquier vehículo de motor de cuatro ruedas cuya velocidad máxima sea superior a 20 millas por hora, pero menor a 25 millas por hora. Si cumplen con los requisitos necesarios, los LSV se pueden manejar legalmente en la mayoría de las carreteras con límites de velocidad de 25 millas por hora o menos, lo que varía según el estado.
- Carritos de golf modificados para mayor velocidad: estos son carritos de golf que han sido modificados después de su fabricación original para aumentar su velocidad. Ya no es legal operar en espacios públicos los carritos modificados que superan una velocidad máxima de 25 millas por hora.
En muchos casos, los fabricantes solo venden carritos de golf homologados para uso en la calle que se califican como carritos de golf personales o LSV. Si vas a comprarle a un tercero, pregunta si se han realizado modificaciones. Es posible que las velocidades del carrito de golf se encuentren fuera del rango legal de velocidades y que sea peligroso manejar el carrito en la vía pública.
Si bien es posible que algunas regiones no requieran seguro, optar por una cobertura podría ser la mejor opción de todos modos, especialmente si planeas frecuentar las carreteras públicas. Si tienes preguntas sobre la cobertura para tu carrito de golf u otros vehículos recreativos, comunícate con un agente de State Farm®.
Si planeas alquilar o manejar un carrito de golf mientras estás de vacaciones, consulta con tu agente sobre la cobertura por adelantado.