Ayuda a superar los problemas de humedad en la vivienda con estos consejos
El alto nivel de humedad de la vivienda no solo es incómodo, sino que puede ser además una amenaza a la estructura y las superficies de tu vivienda.
De acuerdo con ENERGY STAR®, —programa voluntario para la eficiencia energética de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés)— el nivel ideal de humedad de la vivienda oscila entre un 30% y un 50%. El manejo adecuado de los niveles de humedad interior de la vivienda tiene varios efectos positivos. Si implementas soluciones para mantener tu vivienda en el rango correcto, podrías:
- mejorar la comodidad personal;
- controlar la humedad, ya que esta puede dañar la madera, la pintura y el revestimiento de las paredes de tu vivienda;
- prevenir la creación de moho y malos olores en ropa y otras pertenencias;
- mejorar la calidad del aire interior, reduciendo la presencia de ácaros, moho y otros alérgenos;
- reducir las infestaciones de plagas; y
- mejorar la eficiencia energética de tu aire acondicionado.
A continuación, encontrarás algunas maneras de mantener ese rango saludable y limpiar el aire, reduciendo y controlando así la humedad en tu vivienda.
Cómo reducir y controlar la humedad
Algunos propietarios de vivienda utilizan sus unidades de aire acondicionado todo el año para combatir la humedad. A continuación, encontrarás algunas recomendaciones para uso continuo y más efectivo de tu sistema de enfriamiento:
- Pon el ventilador en automático. De hecho, mantenerlo encendido hace que se humedezca nuevamente el área, pasando aire por una bobina húmeda cuando se apaga el condensador.
- Invierte en una unidad con control de aire de velocidad variable.
- Considera instalar un deshumidificador para toda la vivienda.
- No bajes automáticamente la temperatura del termostato. Puede que bajar la temperatura del termostato para reducir la humedad sea una señal de que tienes un sistema de aire acondicionado demasiado grande. Los sistemas de aire acondicionado solamente pueden manejar el grado de humedad que están diseñados a eliminar. Esto lo logran acondicionando el aire fresco que entra, haciendo circular nuevamente el aire interior, o recurriendo a ambas medidas.
- Considera usar un termostato inteligente como parte de tu estrategia para combatir la humedad.
- Reemplaza regularmente los filtros de aire de tu sistema de aire acondicionado para que pueda funcionar más eficientemente.
- Asegúrate de que tu aire acondicionado tenga el nivel correcto de refrigerante. De estar demasiado bajo, puede que tu aire acondicionado tenga dificultad para eliminar la humedad o el calor de la casa.
Más formas de reducir el exceso de humedad
A continuación, encontrarás algunas maneras de ayudar a evitar que se infiltre humedad adicional en la vivienda:
- Instala extractores de aire en baños y cocinas.
- Usa un deshumidificador portátil.
- Cubre los pisos de tierra en los semisótanos con una barrera de plástico contra vapor.
- Sella las fugas de aire y los conductos
- Elige plantas de interiores que absorban la humedad del aire, tales como los helechos de Boston.
- Mantén limpias y despejadas las bandejas de goteo y las líneas de drenaje del aire acondicionado.
- Evita actividades que añadan humedad al aire en días húmedos, tales como tomar duchas calientes y hervir agua en la estufa.
- Asegúrate de que no haya fugas de agua, ya que pueden hacer que el aire se torne húmedo.
- Revisa tu ático y confirma que tiene ventilación adecuada.
- Limpia regularmente el exceso de humedad y agua de mostradores, espejos del baño y demás superficies que puedan mojarse.
- Mantén limpios los canalones y tubos de desagüe, e intenta extender estos últimos dirigiéndolos hacia afuera de la vivienda.
- Riega las plantas solo cuando sea necesario y crea una pendiente en el suelo, en dirección contraria a los cimientos, para ayudar a evitar la acumulación de agua.
- Planta arbustos y árboles alrededor de tu casa, ya que estos absorben la humedad del aire y pueden ayudar a disminuir los niveles de humedad.
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