¿Deberías obtener un seguro de cuidado a largo plazo?

Es probable que en algún punto de tu vida necesites ayuda con tus actividades diarias. De hecho, LongTermCare.gov estima que el 70% de las personas mayores de 65 años de edad eventualmente necesitará cuidado a largo plazo, ya sea en una vivienda, en una comunidad para personas mayores o en un hogar de ancianos.

El seguro de cuidado a largo plazo difiere del seguro de incapacidad en que podría ayudar a cubrir los costos de actividades diarias, como:

• Acostarse y levantarse de la cama
• Bañarse
• Vestirse
• Usar el inodoro
• Comer

Podría ayudarte a conservar tus recursos financieros. Solo sigue unas pocas directrices y ten estos factores en mente si estás pensando en comprar cobertura.

¿Por qué necesito seguro de cuidado a largo plazo?

Una póliza de seguro de cuidado a largo plazo ayuda a cubrir los costos relacionados con el cuidado de personas con incapacidad, condiciones médicas crónicas y trastornos como la enfermedad de Alzheimer. En la mayoría de los casos, las pólizas de seguro te reembolsan por el cuidado recibido en:

• Tu vivienda
• Un hogar de ancianos
• Un centro de cuidado diario para adultos
• Una residencia asistencial para mayores

En la mayoría de los casos, esto permite:

• La protección de los ahorros. Pagar por el cuidado diario por tu cuenta puede vaciar rápidamente tus ahorros para la jubilación. Una póliza de cuidado a largo plazo ayuda a contrarrestar el costo relacionado con el cuidado adicional necesario.
• Más opciones de cuidado. Medicaid podría no cubrir los gastos de residencia asistencial para mayores, esto varía dependiendo del estado. Una póliza de cuidado a largo plazo ayuda a contrarrestar el costo de esas instalaciones.

¿Cuándo debería obtener una póliza de seguro de cuidado a largo plazo?

Examina el seguro de cuidado a largo plazo mucho antes de que lo necesites. Cuanto más esperes para comprar un plan, más alta podría ser tu prima inicial. Además, si esperas, podrías padecer una condición médica que te descalifique para obtener cobertura. Aunque no hay una edad adecuada para comprar, la American Association for Long term Care Insurance estima que más de la mitad de las pólizas de seguro de cuidado a largo plazo las compran personas entre 55 y 65 años de edad. Las tarifas de una póliza de cuidado a largo plazo normalmente incluyen:

• Tu edad y salud: A medida que envejeces, normalmente tienes más problemas de salud que podrían aumentar tus primas.
• Género: Las mujeres normalmente viven más tiempo que los hombres, aumentando la probabilidad de un reclamo de cuidado a largo plazo.
• Estado civil: Normalmente, las primas para parejas casadas son más bajas que las de personas solteras.
• Cantidad de cobertura: Opciones de cobertura adicionales, como límites más altos en beneficios diarios y de por vida, ajustes de costos de vida para protección contra la inflación, y periodos de eliminación más cortos, pueden aumentar la prima.

¿Cómo encuentro una póliza de seguro de cuidado a largo plazo?

La cobertura y el costo varían, así que busca un plan que sea razonablemente económico basado en las coberturas que quieres, en vez de escoger la primera que encuentres.

Compara características

No siempre es fácil evaluar planes. Compara estas características clave:

• Activación de beneficios: Los criterios que usa la aseguradora para determinar cuándo entrará en vigor tu póliza.
• Período de eliminación: El número de días que pagarás el cuidado de tu propio bolsillo antes de empezar a recibir beneficios. El periodo de eliminación mínimo para muchos planes de cuidado a largo plazo es de treinta días.
• Beneficios diarios: La cantidad que la póliza de seguro pagará diariamente. Algunos planes pagan beneficios en función de las horas de servicio, como el número de horas que un asistente para servicios de la salud en el hogar visita tu vivienda.
• Ajustes por inflación: Una característica que ayuda a que tus beneficios se mantengan al ritmo del aumento de los costos.
• Tipos de servicios: Una descripción de lo que está cubierto bajo cada plan y dónde puedes recibir este cuidado, ya sea en el hogar o en una residencia asistencial para mayores, un centro de cuidado diario para adultos, un hogar de ancianos u otras opciones.
• Duración de los beneficios: El período por el que recibirás beneficios, desde unos pocos años hasta el resto de tu vida.
• Exclusiones: Las condiciones o hechos estipulados que los beneficios no cubrirán. Estas podrían incluir condiciones causadas por alcoholismo o comportamientos peligrosos.

Obtén más información acerca del seguro de cuidado a largo plazo en LongTermCare.gov.