Garantía para el hogar
Conseguir una garantía para el hogar podría ayudarte a la hora de tener problemas con tu casa. Aquí tienes algunos consejos para ayudar a explicar qué son y cómo funcionan.
Asegurar la compra de una casa puede producir una enorme satisfacción, sin importar lo difícil que haya sido llegar a ese momento. Puede no hacer mucha gracia, en cambio, descubrir que con la casa se nos vienen otros gastos, y que la compra es solo el comienzo.
Por ejemplo, si financiaste la vivienda como la gran mayoría de personas, las entidades hipotecarias usualmente exigen a los deudores un seguro de propietarios de vivienda. Y tiene total sentido no solo para el prestamista sino para el comprador, ya que una casa constituye una enorme inversión que se demorará años en pagar. En suma, pagar una prima de seguro de vivienda parece algo insignificante comparado con el riesgo de perder tu casa en un incendio, una catástrofe climática o un accidente. Pero… ¿es eso todo?
Las garantías de casas son una opción para el propietario
Supongamos que eres un comprador primerizo de vivienda, y que cerraste el trato de compra de una casa de 25 años de antigüedad. Te mudas con tu familia y todo es felicidad hasta que, meses después y ya en pleno verano, se descompone el sistema de aire acondicionado. O se rompen unas tuberías en el sótano. O tienes un cortocircuito eléctrico…
Contar con un seguro de propietarios de vivienda no necesariamente te ayudará con ninguno de esos problemas. Consulta con un agente para los detalles de tu cobertura, ya que un seguro de propietarios de vivienda puede cubrir los daños a la estructura de la vivienda o a tu propiedad personal como resultado de una pérdida cubierta, y pudiera excluir reparaciones de equipos y electrodomésticos causadas por uso y desgaste. En este último caso, probablemente tengas que llamar a un técnico y afrontar tú mismo el gasto de la reparación o el reemplazo de tus equipos. Es por eso que puede ser provechoso comprar una garantía de vivienda o “home warranty” antes de tener estos dolores de cabeza, especialmente si vas a comprar una casa con ciertos años de antigüedad.
¿Qué es una garantía de vivienda?
Una garantía de vivienda no es un seguro. Es un contrato de servicio que ofrecen ciertas compañías que podría ayudar a cubrir problemas y averías de los sistemas principales de la vivienda y de muchos de los electrodomésticos que usas en casa. Esos contratos suelen ser anuales y renovables, y los precios, según Consumer Affairs en el 2025, van de $350 a $700, aunque las coberturas más amplias pueden costar entre $1,200 y $1,400.
Dada la conveniencia y las opciones que pueden ofrecer las garantías de vivienda, los agentes de bienes raíces las pueden recomendar como parte del contrato de venta y de forma gratuita para el comprador, especialmente si se trata de viviendas de 10 años de antigüedad o más. Según el sitio web de This Old House, las garantías de vivienda se han convertido en un argumento de ventas útil.
¿Qué cubre una garantía de vivienda?
En las garantías de vivienda suelen estar cubiertos los sistemas importantes para el funcionamiento de una vivienda, y por lo general cubren lo siguiente (aunque te aconsejamos confirmar esta lista con la compañía que elijas, antes de tomar una decisión):
- refrigeradores
- lavaplatos
- lavadoras y secadoras
- equipos de aire acondicionado y calefacción (sistemas HVAC)
- cocinas (estufas), hornos
- calentadores de agua
- sistemas eléctricos
- tuberías y plomería en general
- bombas de sumidero
- equipos de spas y piscinas
¿Quién hace las reparaciones?
Las compañías que ofrecen garantías para el hogar tienen acuerdos con compañías de servicio técnico que poseen seguro y han sido evaluadas para ofrecer servicios en tu área. Cuando tienes una falla, llamas por teléfono o ingresas a su sitio web para dar cuenta del problema y programar una visita de servicio. Cuando recibes la visita del técnico, este determina si el problema requiere reparación o reemplazo.
El propietario solo sería responsable de pagar el costo de la “llamada de servicio” acordado al firmar la garantía de vivienda, que puede ser entre $75 y $150, aunque también podría tener que afrontar cualquier cantidad extra que exceda el límite establecido en tu plan. Y dado que todas las compañías emiten sus propias cláusulas, exclusiones y límites de cobertura, es importante revisar de antemano los términos y condiciones que regirán el servicio en tu caso particular.
¿Vale la pena contar con una garantía de vivienda?
Solo tú puedes evaluar si vale la pena o no contar con una garantía de vivienda, o si vale la pena renovarla anualmente si la recibiste al comprar tu casa. La edad de los equipos y electrodomésticos en una vivienda, y la forma en que la compañía responde en el primer año de servicio pueden ser claves a la hora de determinar si te conviene tener o mantener una garantía de vivienda.
Contar con una protección adicional es importante, pero solo tú puedes determinar si el precio que pagas lo amerita, y si no estás pagando de más por servicios que probablemente no necesites.