Durante los días más cortos de enero, tanto el suelo como el techo pueden seguir resbalosos durante semanas, haciendo que tus primeros proyectos del año al aire libre sean todo un reto. Afortunadamente, puedes encargarte de tu lista de tareas pendientes para el exterior de la casa sin sacrificar tu seguridad. Aquí te decimos cómo.
Vístete para el éxito. Antes de aventurarte al exterior, viste varias capas de ropa, de pies a cabeza, para prevenir las lesiones por congelamiento e hipotermia. Lo mejor es vestirse con tres capas: una primera capa que absorba la humedad de tu cuerpo, una capa aislante que mantenga el calor adentro y una capa que te proteja de los elementos. Si te hace calor, te puedes quitar una capa de ropa.
Ten cuidado con las superficies resbalosas. Es de esperar que las precipitaciones invernales deje la entrada a los garajes y las aceras resbalosas, pero a veces es difícil reconocer una delgada capa de hielo. Si temes toparte con superficies resbalosas, usa zapatos planos con buena tracción y camina lentamente con tus rodillas un poco dobladas.
Palea inteligentemente. Quitar la nieve es un buen ejercicio (15 minutos haciéndolo cuenta como una actividad física moderada), pero hacer mucho muy rápidamente puede costarle caro a tu cuerpo. Primero calienta para aumentar tu ritmo cardíaco. Toma una pala pequeña y recuerda agacharte con tus rodillas, no con tu espalda. Obtén indicaciones para palear, del National Safety Council.
Sube con cuidado. Ya sea que estés quitando la nieve de tu techo, bajando las decoraciones de los días festivos, podando árboles o intentando hacer cualquier otra actividad al aire libre, que involucre una escalera, espera a que el piso esté seco, y utiliza la escalera de forma inteligente. Mejor aún, contrata un profesional para completar estas tareas.
Quita las decoraciones con cuidado. Al quitar las luces, ten cuidado de no dañar las ramas del árbol o planta. Mantén los cables de luces sin enredar y fíjate dónde pisas para no pisar las bombillas mientras empacas los cables. Y, exactamente como lo hiciste al principio de la época festiva, revisa los cables de luces para ver si tienen señales de daño y descartar aquellos que estén desgastados o dañados.